Risotto de Champiñones con Trufa y Parmesano
Ingredientes:
- Para el risotto:
- 300 g de arroz arborio (especial para risotto)
- 200 g de champiñones frescos (mezcla de setas como shiitake, portobello, ostra)
- 1 cebolla pequeña, finamente picada
- 2 dientes de ajo, picados
- 1 litro de caldo de verduras o pollo (caliente)
- 150 ml de vino blanco seco
- 50 g de mantequilla
- 50 g de queso parmesano rallado
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Aceite de trufa (opcional, para dar más sabor)
- Sal y pimienta al gusto
- Para decorar:
- Láminas finas de trufa fresca (opcional)
- Perejil fresco picado
- Queso parmesano adicional
Instrucciones:
- Preparar los champiñones:
- Limpia y corta los champiñones en rodajas finas. En una sartén grande, calienta 1 cucharada de aceite de oliva y saltea los champiñones con una pizca de sal hasta que estén dorados y tiernos. Retira y reserva.
- Cocinar la base del risotto:
- En una olla amplia, calienta el resto del aceite de oliva y la mitad de la mantequilla a fuego medio. Agrega la cebolla picada y el ajo, cocinando hasta que estén translúcidos y fragantes, sin que se doren.
- Añade el arroz arborio y cocina durante 2-3 minutos, removiendo constantemente, para que se impregne de los sabores y se vuelva ligeramente translúcido.
- Añadir el vino:
- Vierte el vino blanco sobre el arroz y remueve hasta que se evapore casi por completo.
- Agregar el caldo gradualmente:
- Comienza a añadir el caldo caliente, una cucharada a la vez, removiendo constantemente. Espera a que el líquido sea absorbido por el arroz antes de añadir más. Continúa este proceso durante unos 18-20 minutos, hasta que el arroz esté al dente y cremoso.
- Incorporar los champiñones:
- A mitad de la cocción del risotto, incorpora los champiñones salteados, mezclando bien.
- Terminar el risotto:
- Una vez que el arroz esté cocido, retira la olla del fuego y añade el parmesano rallado, la mantequilla restante y un chorrito de aceite de trufa si lo usas. Mezcla todo para que quede cremoso.
- Servir:
- Sirve el risotto en platos hondos, decorado con láminas de trufa fresca, perejil picado y un poco más de queso parmesano rallado.