Raviolis de Langosta con Salsa de Mantequilla y Salvia
Ingredientes:
- Para los raviolis:
- 200 g de harina de trigo
- 2 huevos grandes
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 200 g de carne de langosta cocida (puedes usar langosta fresca o congelada)
- 100 g de ricotta fresca
- 1 cucharada de cebollín fresco, picado
- Sal y pimienta al gusto
- Para la salsa de mantequilla y salvia:
- 100 g de mantequilla
- 6-8 hojas de salvia fresca
- 1 diente de ajo, finamente picado
- 1/4 taza de vino blanco seco
- Sal y pimienta al gusto
- Queso parmesano rallado para decorar
Instrucciones:
- Preparar la masa de los raviolis:
- Coloca la harina en un bol grande y haz un hueco en el centro. Añade los huevos y el aceite de oliva. Mezcla con un tenedor e incorpora poco a poco la harina hasta formar una masa.
- Amasa durante unos 10 minutos hasta que la masa esté suave y elástica. Envuelve en film transparente y deja reposar en la nevera durante 30 minutos.
- Preparar el relleno de langosta:
- En un bol, mezcla la carne de langosta finamente picada con la ricotta y el cebollín. Sazona con sal y pimienta al gusto. Reserva en la nevera.
- Formar los raviolis:
- Estira la masa sobre una superficie enharinada, con la ayuda de un rodillo o máquina de pasta, hasta obtener una capa delgada.
- Coloca pequeñas porciones del relleno de langosta a intervalos regulares sobre la mitad de la masa. Humedece los bordes con agua y cubre con la otra mitad de la masa. Presiona bien alrededor de los montones de relleno para sellar los raviolis.
- Corta los raviolis con un cortapastas o un cuchillo y asegúrate de sellar bien los bordes. Deja reposar los raviolis sobre una superficie ligeramente enharinada mientras preparas la salsa.
- Cocinar los raviolis:
- Cocina los raviolis en una olla grande con agua hirviendo con sal durante 3-4 minutos, hasta que floten en la superficie. Escúrrelos con cuidado y reserva.
- Preparar la salsa de mantequilla y salvia:
- En una sartén grande, derrite la mantequilla a fuego medio. Añade el ajo y las hojas de salvia, cocinando hasta que la mantequilla adquiera un color ligeramente dorado y las hojas de salvia estén crujientes.
- Vierte el vino blanco y cocina hasta que se reduzca un poco. Sazona con sal y pimienta.
- Montaje del plato:
- Coloca los raviolis en la sartén con la salsa de mantequilla y salvia, mezclando suavemente para cubrirlos.
- Sirve los raviolis decorados con queso parmesano rallado y algunas hojas de salvia crujiente.